INTENSAMENTE

 Las emociones son un estado afectivo que experimentamos acompañado de cambios orgánicos (de origen innato o influidos por la experiencia, es decir, las emociones siempre van a repercutir en 3 aspectos fundamentales de nuestra realidad bio-psico-social. Muchas veces o mejor dicho la mayoría de las veces pueden llegar a pasar desapercibidas, inclusive seria fatigante el registrar todas las emociones que a lo largo del día llegamos a experimentar, aun así hay algunas que pueden llegar a afectar nuestra cotidianeidad. 

Por esta razón es importante saber y entender que pasa con las emociones, cuales son y sobre todo como llegar a un equilibrio entre emoción y acción, debemos entender que las emociones van a ser expresadas y entendidas de diferentes maneras por cada individuo.

Las emociones cumplen un papel muy importante, nos ayudan a dirigir nuestra conducta y a actuar rápidamente, son las que muchas veces nos alertan o las que generan sensaciones positivas, a continuación, te enlistamos las emociones básicas:

Sorpresa: La sorpresa se puede definir como una reacción causada por algo imprevisto, novedoso o extraño. Es decir, cuando aparece un estímulo que el sujeto no contemplaba en sus previsiones o esquemas.

Asco: El asco es una de las emociones básicas que se conocen desde los trabajos de Charles Darwin acerca de la emoción animal. Esta se caracteriza por una sensación de repulsión o evitación ante la posibilidad, real o imaginaria, de ingerir una sustancia nociva, que tenga propiedades contaminantes.

Miedo: El miedo es la emoción más estudiada en los animales y en el ser humano. Es un estado emocional negativo o aversivo con una activación muy elevada que incita la evitación y el escape de situaciones peligrosas.

Alegría: La alegría es, de todas las emociones básicas, quizás la más positiva: está asociada de manera directa con el placer y la felicidad.

Tristeza: Dentro de las emociones básicas, la tristeza es la que encarna una mayor negatividad. Esta emoción se caracteriza por un decaimiento del estado de ánimo y una reducción significativa en su nivel de actividad cognitiva y conductual

Ira: La ira es el sentimiento que emerge cuando la persona se ve sometida a situaciones que le producen frustración o que le resultan aversivas.

Sean de valencia positiva, negativa o neutra, lo cierto es que las 6 emociones cumplen con funciones que favorecen nuestra supervivencia, relacionarnos socio afectivamente con otras personas, las decisiones que vamos tomando todos los días.

Aunque a partir de estas 6 emociones básicas o primordiales se derivan todas las demás (Secundarias) muchas veces nos ponen en un sentido de alerta constante, tal vez la única que no tiene esta peculiaridad sea la alegría, sin embargo, esta nos puede tener en un estado de vulnerabilidad. Con esto no significa que las emociones sean malas, lo que se debe entender es que las decisiones que se tomen todos los días, no deben estar ligadas a la emoción debiesen de estar ligadas a un análisis de consecuencias y responsabilidades.

Por esto es importante el manejo de estas.

El manejo de emociones es una forma de regular nuestras acciones a partir de la emoción que en este permeando en nuestra manera de comportarnos, ninguna emoción que prevalezca es buena inclusive la alegría, uno podría pensar que la alegría es el objetivo de la vida misma sin embargo, la felicidad solo es transitoria, y nos puede hacer tomar decisiones que tal vez no necesitábamos o no deseábamos pero en ese momento la alegría se encargó de tomar esa decisión por nosotros. Cuando sacamos 10 en un examen y no estudiamos para el siguiente y reprobamos, cuando nos llega dinero y lo consumimos en algo que no necesitábamos y/o queríamos, por esto es necesario regular nuestras emociones.

Identifica la situación. Si es posible que te des cuenta de cuándo una determinada situación o persona puede ser perjudicial para ti o puede generarte algún malestar emocional. ¡ALÉJATE!

Reconoce tus emociones a nivel corporal. Si conoces bien donde te duele donde tensas cuando se agita tu respiración, puedes con mayor felicidad identificar la emoción y tratar de controlarla.

Cambia la situación. Si no puedes alejarte entonces intenta cambiar la situación perjudicial, buscando evitarla.

Cambia tu mismo. Muchas veces no podemos cambiar lo exterior pero sí nuestra percepción de lo que sucede. Si aprendemos a ver muchos ángulos de una situación podremos escoger la forma más positiva de interpretarla sino, al menos trata de ver tu propia aptitud frente a ella en una luz más positiva.

Maneja tu respuesta. Muchas veces la respuesta de tu entorno frente a una situación compartida, depende de tu respuesta emocional, que puede empeorarla o mejorarla. Evita seguir tus impulsos sin pensar. Utiliza técnicas de relajación y de distracción.

El manejo de las emociones no es una tarea sencilla, si se quiere cambiar esto va a ser un contante tropezar con estas emociones sin embargo, por el bienestar, la autoestima y confianza es necesaria para llevar un estilo de vida sano.