"Tolerancia significa disculpar
los defectos de los demás;
tacto, no reparar en ellos."
(Schnitzler, Arthur)
¿Te imaginas como te sentirías si las personas que te rodean no te aceptan tal cual eres, te critican y/o rechazan?
Todos los días conocemos y convivimos con personas diferentes, tanto físicamente como mentalmente y a pesar de ello muchos de nosotros no estamos acostumbrados a respetar esas diferencias; nos olvidamos que todos somos iguales, porque al mismo tiempo todos somos diferentes.
La discriminación es una práctica cotidiana que consiste en dar un trato desfavorable o de desprecio inmerecido a determinada persona o grupo, que a veces no percibimos, pero que en algún momento la hemos causado o recibido, esta situación tiene diversas manifestaciones en la vida cotidiana y es importante conocerlas para evitarlas, ya que los pequeños actos de discriminación son la clave para reducir esta situación, algunos ejemplos de estas manifestaciones son:
- Comentarios negativos acerca de alguna característica física, por ejemplo por el color de la piel, la estatura o la forma de caminar
- Excluir de ciertas actividades por la preferencia sexual
- Juzgar por el lugar de origen o la etnia a la que se pertenece
- Catalogar a alguien como bueno o malo por ciertos gustos o ideas
- Criticar por la manera en cómo se viste o como se expresa
Es importante señalar que cada uno de nosotros tiene ideas distintas de lo bueno y lo malo y a lo largo de nuestra vida se forman prejuicios que limitan la inclusión de personas que sean diferentes a nosotros, sin embargo es necesario recordar que no tenemos que aceptar todo lo que existe a nuestro alrededor… simplemente respetarlo.
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