La adicción a los videojuegos (consolas, móviles, etc.) significa una
fuerte dependencia hacia los mismos que se caracteriza por ser una actividad
que ocupa demasiado tiempo en la vida de la persona y se continúa practicando a
pesar de conllevar consecuencias negativas.
En la actualidad es muy común ver que la forma de diversión para muchos
niños y adolescente es estar frente a un
televisor jugando con su consola de videojuegos
dejando las relaciones interpersonales como sería salir con tus amigos, pareja o hasta con la familia.
Es muy común
ver en estas personas que son adictas a los videojuegos sin darse cuenta se va
convirtiendo en una persona aislada ya que los amigos por las actitudes de poco
interés a la interacción dejan de buscarlo y por lo tanto ya para ellos deja de
tener una valor como persona.
Como
cualquier adicción que conocemos tiene muchas consecuencias no solo sociales si
no también físicas ya que es unos de las principales causas de la obesidad en los niños y adolecentes ya que
te vuelves un ser sedentario, donde no realizar ningún ejercicio físico, aun
podemos recordar la forma de diversión de hace mas 10 años era muy distinta, ya
que para poder jugar tenias que recurrir a más niños o personas donde ibas
aprendiendo a establecer relaciones sociales y promovía una esfuerzo físico
como lo era correr, patear una pelota, tener una coordinación viso motora
adecuada. En la actualidad con el aguje que tomaron los videojuegos todas estas
maneras de diversión fueron desapareciendo y con ello llegaron niños más
inseguros para las relaciones fuera de su entorno familiar, niños que no buscas
salir de un estado de confort y comodidad.
Los
creadores de los videojuegos ya son consientes del daño que están provocando a
los usuarios y en un intento por resolver este problema de sedentarismo salió
al mercado el kinect para la consola del Xbox donde pretende que el usuario
tenga una manera más activa en los juegos, donde ya no solo juegues sentado si
no te muevas y promover la activación física pero cabe mencionar que no
sustituye un sano desarrollo.
Como todo en
esta vida los excesos pueden perjudicarnos y en el caso de los videojuegos es
una manera sana de divertirse, lo que ya no es sano es el tiempo mayor que se
pasa jugando ya no como diversión si no como obsesión.