17 de agosto de 2009

METODOS ANTICONCEPTIVOS Y EMBARAZO EN LA ADOLECENCIA



>>“A mi no me va a pasar”, “Yo! Quedar embarazada? Jamás!”, “Yo creo que soy infértil, porque no he pasado por ningún susto”<<>


Es por eso que la primera relación coital es una experiencia que requiere una serie de condiciones previas que pocos adolescentes contemplan, mantener relaciones sexogenitales saludables implica el uso responsable de un método anticonceptivo desde la primera vez, porque desde ese momento existen posibilidades de embarazo no planeado, pero este dato los jóvenes lo pasan por alto ya que tienen la falsa idea de que en la primera relación no se puede quedar embarazada.


Si se ha iniciado una vida sexual activa es esencial recurrir a la anticoncepción, por la cual se puede evitar el embarazo mediante el uso correcto de métodos o productos que interfieren en la fecundación y en algunos casos la transmisión de infecciones venéreas, conviene recordar que si se mantienen relaciones sexuales con cierta regularidad y no se usa ningún método anticonceptivo, la probabilidad de embarazo es altísima: es decir el 8O % en un año.


No existe una edad adecuada para comenzar a tener una vida sexual activa, todo depende de las circunstancias personales de cada uno. En cambio, sí puede determinarse claramente cuando uno está preparado para tener su primera relación sexual, esto debe de incluir un alto grado de responsabilidad personal, con la pareja y tener un buen conocimiento sobre el uso correcto del los métodos anticonceptivos, la elección de uno u otro dependerá de múltiples factores, como son la frecuencia de las relaciones, la edad, las preferencias personales y la comunicación que se tenga con la pareja.


Es importante concientizar sobre la anticoncepción, ya que si no se usan los métodos o se usan inadecuadamente pueden generar problemas de salud, ya que hay exposición a contraer infecciones y diversidad de problemas de índole física y psicológica si llegado el momento hay que enfrentarse a un cambio drástico en la forma de vida por la pronta llegada de un hijo. No hay que fiarse de la información dada por amigos y compañeros de la misma edad, sino acudir a los centros de planificación e información sexual dedicados a esa tarea.


Si tienes alguna duda respecto a este tema llama a De joven a joven 01 800 715 19 26, una línea de asesoría psicológica que funciona las 24 horas del día y todo el año, además de que es gratuita, anónima y confidencial; o dejanos tus comentarios en este tu espacio!!


10 de agosto de 2009

Manipúlame!!... Pero no me dejes!: Chantaje emocional



>”Tu veras que haces, es tu vida y la respeto… pero si haces lo contrario a lo que te dije, no me vuelvas a hablar”<


Al leer el titulo habrán pensado que me equivoque, que debía de decir “pégame, pero no me dejes”, sin embargo no, no me equivoque; en este caso se trata de un tema que actualmente se esta viviendo en todo tipo de relaciones interpersonales, pero que por ser tan sutil puede pasar desapercibido, estoy hablando del chantaje emocional.

Al inicio pudiste leer una frase que ejemplifica esta problemática; el chantaje emocional es una forma de manipulación muy poderosa, en la cual personas cercanas y afectivas nos amenazan, directa o indirectamente con castigos de alguna manera si no hacemos lo que ellos quieren. Se puede presentar en relaciones familiares, de pareja, de amigos, escuela o con colegas del trabajo, en relaciones que cuentan también con aspectos positivos y por ello resulta difícil identificar. Para que el comportamiento se califique como chantaje emocional debe cumplir algunas características.


Aquí te damos los síntomas para identificar si estamos inmersos en una relación con chantaje emocional:



  • Exigencia: la persona realiza una petición pero no expresa con claridad lo que quiere o necesita y espera que sea la otra persona quien adivine.



  • Resistencia: cuando la persona que sufre del chantaje se resiste a las peticiones o de respuestas negativas para el otro.



  • Presión: cuando el chantajista nota que la respuesta o reacción no es la que el quiere, presiona para que se cambie de idea y no hace esfuerzo para entender al otro.



  • Amenazas: si su deseo no es cumplido el chantajista hace saber al otro que sufrirá consecuencias negativas por no ceder.



  • Obediencia: la victima frente a la presión y temor de perder al otro, cede a las peticiones, aun no estando de acuerdo.



  • Reiteración: el chantajista consigue lo que quiere, deja de existir presión y la relación se estabiliza; hay un alivio por parte de la victima pues ya no siente temor ni presión.

Si identificaste que alguna de tus relaciones interpersonales cumplen con estos síntomas, es vital que sepas que este circulo de chantaje tiene un solución; es necesario aprender a responder y comunicarse de manera diferente, fijar limites y principalmente hacer un compromiso personal de respeto y para lograr un cambio.

Si tienes alguna duda respecto a este tema llama a De joven a joven 01 800 715 19 26, una línea de asesoría psicológica que funciona de lunes a viernes de 8 a 20hrs., además de que es gratuita, anónima y confidencial; o dejanos tus comentarios en este tu espacio!!!

4 de agosto de 2009

Tengamos el sexo en paz...

Quizá de pronto pudiéramos pensar en un sinfín de situaciones en las cuales podría aplicarse esta pequeña frase…sin embargo, ubiquémonos en un aspecto de nuestra vida que es fundamental: cuando decidimos iniciar una vida sexual activa, muchas veces dejamos de considerar métodos que pudieran protegernos y porque no, evitarnos estar en apuros en algún momento…consideremos el ejercicio de nuestra sexualidad y la forma de procurarnos a nosotros mismos y a la pareja haciendo uso de métodos anticonceptivos que nos ayuden a prevenir/ contraer alguna infección de transmisión sexual (ITS) o evitar un embarazo no planeado/deseado, finalmente si sucediera significaría modificar o atrasar algunas metas viéndose impedido porque adquirimos una “responsabilidad a destiempo”, teniendo que concluirlas en un tiempo mayor a lo previsto, decimos esto ya que en algún momento de nuestra vida pensamos en formar una familia y las condiciones en las cuales llegan a veces resultan poco adecuadas para nosotros, el hecho de tener un hijo debería de ser una decisión, y así como hay personas que quieren tener sólo uno, sólo dos o más, también están quienes eligen directamente no tenerlos…resulta entonces, que el momento para decidir ser padres es tan variable en cada persona y en cada pareja: esperar a tener una relación estable, un título universitario o de postgrado, una estabilidad económica, emocional, un buen puesto o sólo un trabajo, y tantos otros motivos que pudieran aparecer de pronto.
El decidir tener un hijo implica numerosos cambios en la vida de los futuros padres desde el aspecto biológico, psicológico y social-adquiriendo nuevos roles y dejando atrás otros. Sin duda alguna, la reproducción forma parte de nuestra sexualidad y desarrollo como individuos, por ello resulta importante definir los tiempos y formas en los cuales una decisión resultaría la más adecuada en cierta etapa de nuestra vida.