En este mes conmemoramos de agosto dos fechas muy importantes:
12 de agosto "Día Internacional de la Juventud"
28 de agosto "Día del adulto Mayor"
Por lo que nuestro gran interés en abarcar dos grandes temas del ciclo vital de la vida:
Juventud y Vejez.
No puede haber cosa más alegre y feliz que la vejez
pertrechada con los estudios y experiencias de la juventud.
Cicerón
Por definición podemos notar que la vejez y la juventud parecen tan contrarias, ¿Qué pasaría si intentamos relacionar ambas?
La juventud y la vejez espacios en el tiempo de la vida, lugares distintos en una sola línea a seguir, todos envejecemos, sin embargo, para algunas personas puede representar una elección llegar de forma prematura, al final es algo que no podemos evitar.
Lo primero de la juventud es el cambio de ser adulto a tener un pensamiento independiente, el autodescubrimiento, sólo si ese proceso se llevo de forma adecuada, entonces lo que sembramos con tanto esmero es lo que cosechamos, aquí la primera relación, el adulto mayor, ha disfrutado de su individualidad, es decir, si intentamos ser felices en la juventud y desarrollar todas nuestras ideas, pensamientos, potencialidades, todo ello se multiplica más adelante en la vida, no por arte de magia por supuesto, con esfuerzo dedicación, paciencia para aguardar, pero sobre todo, saber tomar la vida como un viaje al centro de uno mismo.
En el comportamiento ambas etapas convergen: surgen rasgos de desafiar y hacer lo que se desea cuando se desea, intentan descubrir que tan libres son, uno por su nuevo mundo lleno de matices, formas y color, el otro para reafirmar lo ya descubierto, demostrando que aún es dueño de su existencia.
En los jóvenes se espera que aumenten su rendimiento, cosa que muchas veces no llega a suceder, en ese punto nuevamente estas dos etapas, aunque claro los dos pasa por razones del todo distintas, en el joven es por la sensación de tiempo ilimitado, pero también como negativismo, mientras en el adulto mayor surge porque su cuerpo contiene una energía que se agota al realizar tareas físicas, paradójicamente: uno tiene fuerzas que no quiere usar y el otro no tiene fuerzas para usar.
Lo importante al hacer notar estas similitudes, es aportar la idea de que los adultos mayores merecen respeto por parte de los jóvenes y viceversa.
Debemos cambiar nuestra actitud, ser receptores de la experiencia y co participes de mejores lazos con la familia y sociedad.
Los jóvenes debemos considerar el mundo y a las personas sin importar edad, como un conocimiento constante de nuevas ideas. Aprender a crecer, aprender a apreciar a otros.